Esta noche de un invierno que ya promete primavera voy a dedicar unas líneas a una guitarrista de la dimensión del Rock, cuyas capacidades musicales también son destacables en otros instrumentos como el piano o la batería, y por supuesto en la voz, para mi gusto una de las mejores del panorama musical actual: hablamos hoy de Orianthi Panagaris.

Pese a que el nombre y apellido no oculta su origen griego nuestra protagonista nace en Adelaida (Australia) el 22 de enero de 1985, por lo que tiene 36 años recién cumplidos.

Comenzó con la música con sólo tres años, eso sí, en el piano donde seguramente resulta más estimulante e inicialmente sencillo obtener sonidos claros por mera pulsación a diferencia de los instrumentos de cuerda que requieren de un esfuerzo físico y técnico mayor para obtener un sonido básico. No obstante, Orianthi no tardó mucho en iniciar su práctica con la guitarra acústica, con apenas seis años, y con poco más de diez tenía ya un dominio asombroso. Su padre, que solía tocar en una banda griega, tenía muchos instrumentos esparcidos por la casa, lo que facilitó a nuestra artista experimentar desde la curiosidad infantil con gran parte de ellos, pero estaba escrito en su buena estrella que la guitarra era su instrumento y su ilusión era tocar la guitarra eléctrica. De hecho cuando tenía 11 años pudo disfrutar como espectadora de un concierto que Carlos Santana dio en Adelaida y fue para ella tan impactante que rogó a su padre que le comprara una guitarra de segunda mano, eso sí, eléctrica, para emular al gran guitarrista mexicano.

Si repasamos las biografías de la gran mayoría de los grandes intérpretes mundiales de la guitarra eléctrica comprobamos que comenzaron a tocar con 13 años o más, y esta chica australiana ya llevaba por entonces unas cuantas vueltas en “la nave” de la interpretación. No es extraño por tanto que a los 15 años se centrase por completo en la música y, en concreto, en la composición de canciones pues en Orianthi confluyen ambos talentos: el interpretativo y el creativo, lo que no es común de todos los artistas sobre los que hemos tratado en este blog.

Y es a esa edad, con sólo 15 años, cuando tiene la oportunidad de compartir escenario con el guitarrista, compositor, y productor musical estadounidense Steve Vai (1960), que ha vendido más de 15 millones de álbumes y que había tocado con nada menos que Frank Zappa en los primeros años ochenta. Ya antes, con 14 años, en 1999 había editado su primer EP titulado Under The Influence.

Una nueva visita a Adelaida de Carlos Santana, al que hemos dedicado una biografía en esta sede el 3 de mayo de 2019: Carlos Santana: Rock con ritmo latino y afrocubano, permitió a Orianthi hacerle llegar por medio del hermano de Carlos un fragmento de su música, lo que interesó a la estrella, al punto de organizar una sesión privada en la que la guitarrista seguro que dio lo mejor de sí, porque la invitó seguidamente a tocar con él en el concierto programado en su ciudad natal, y no fue una intervención efímera, ya que le acompañó durante más de media hora y llegó a ejecutar un solo propio. Cuando antes mencionaba su dualidad entre el talento compositivo y el interpretativo quizás habría que atribuirle también el talento expresivo de una puesta en escena con todos los marcadores críticos: una estrella a su lado, la inexperiencia en un gran escenario y la exposición ante su gente. Pero esa valla la saltó Orianthi con naturalidad y precisión.

Seguramente si utilizamos el argot propio del toreo para referirnos a este concierto de Adelaida habría que tomar prestada la frase de que sólo se podría salir “por la puerta grande o por la enfermería” pero a nuestra protagonista “no le pilló el toro” y este concierto supone el primer gran impulso para llegar a integrar el Club de los grandes guitarristas del Hard Rock de principios de este Siglo XXI: como Eddie Van Halen, los citados Steve Vai y Carlos Santana, Tony Macalpine, Richie Kotzen, Richie Sambora, Steve Stevens, Jennifer Batten o Larry Carlton; entre los cuales únicamente Jennifer Batten y la propia Orianthi son mujeres.

De algunos de estos sobresalientes guitarristas del Rock hemos tratado en este blog y, en concreto, sobre Richie Sambora el 18 de mayo de 2018: Richie Sambora, energía y elegancia para “atacar” a una Fender y sobre Eddie Van Halen el 22 de febrero de 2019: Eddie Van Halen ¿Cómo tardé tanto en escucharte? además del enlace ya indicado de la biografía de Carlos Santana.

Orianthi ha tocado con buena parte de los guitarristas de este selecto grupo, además de con otras grandes estrellas musicales de muy diversos estilos como Prince, Alice Cooper, Carrie Underwood, ZZ Top, Eric Clapton, -a quien también se le dedicó su espacio en el blog: Clapton… ¿alguien no lo conoce?, además de Steve Vai y Carlos Santana (entre otros muchos).

Esta intensa y estimulante, sin duda, colaboración con tantas estrellas de la música, no sólo del Hard Rock, seguramente ha mediatizado si no la composición propia, sí la grabación y difusión de su música para lo que es parte imprescindible proyectar giras. No obstante, Orianthi tiene publicados cuatro discos como solista: Violet Journey (2007), Believe (2009), Believe II (2010) y Heaven in This Hell (2013), además de un disco compartido con el guitarrista Richie Sambora editado en 2018 como dúo musical denominado RSO: Radio Free America.

Las guitarras que toca Orianthi son de la marca PRS maridadas con amplificadores ENGL Amps, teniendo, como otros grandes de la guitarra, su propio modelo, la PRS Orianthi.

La base de operaciones de Orianthi ya no es su Adelaida natal sino que vive en Los Ángeles aunque siempre con las maletas preparadas para girar por todo el mundo con tantos y buenos artistas que la demandan.

Hace unos meses, el 9 de octubre de 2020, dedicamos aquí un lugar a la jovencísima guitarrista francesa Tina Setkic: Tina Setkic, la revolución eléctrica de los clásicos en la que destacábamos que una de sus influencias era precisamente Orianthi Panagaris, por lo que me pareció interesante profundizar un poco en la carrera musical de esta excepcional guitarrista australiana para rendirle el merecido tributo.

Comparto con vosotr@s seguidamente el vídeo de uno de sus mayores éxitos: Frozen del disco Heaven in This Hell: https://youtu.be/IIzIX3LsoSo.

Resulta un tema bastante representativo del potencial de Orianthi con toda la fuerza de los riffs de su guitarra y la delicadeza de una voz aguda perfectamente ensamblada en las quintas graves de su interpretación instrumental.

Las influencias de Panagaris a las seis cuerdas han sido, además de sus admirados Carlos Santana y Steve Vai, otros como Stevie Ray Vaughan, Al Di Meola-, a quien rendimos homenaje aquí el 27 de septiembre de 2019: Al Di Meola, la guitarra del Jazz-Rock -, B.B King -del que nos ocupamos el 14 de diciembre de 2018: B de Blues: B.B. King, Joe Satriani,Tommy Emmanuel y Eric Clapton.

La verdad que comentar la carrera musical de Panagaris en 2021 resulta prematuro porque aún le queda en buena lógica más de la mitad de este maravilloso viaje pero es cierto que ya ha alcanzado el nivel Top para ser una joven leyenda de nuestro instrumento. Pero bueno, en este planeta ya no podría tocar con muchos músicos más sobresalientes. Si en Marte descubre alguno el robot explorador Perseverance aún tendrá tiempo para dar un concierto en el planeta Rojo. En cualquier caso, yo estaré encantado de hacer un segundo capítulo de su trayectoria en unos lustros para seguir admirando lo mucho y bueno que la australiana va a aportar al mundo del Rock.

Pero, volvamos a la música, fijaos en la fuerza del tema Think like a man (del disco Believe) cuyo audio comparto ahora: https://youtu.be/IWqvEsnc2FM.

“Orianthi Panagaris” no suena precisamente muy comercial pero ése es otro mérito, el de quien no necesita de ningún artificio de disociación nominal para crear un avatar musical porque, admirada amiga, tú eres Orianthi, la chica que visionaba una y otra vez los vídeos VHS de Carlos Santana para asimilar y calibrar cada detalle de sus solos, y a la vez la guitarrista del Rey del Pop, el inolvidable Michael Jackson, llegando a ser parte de su banda en los conciertos en el O2 Arena en Londres y participar en todos los ensayos de su recordado tour This is it antes de su muerte, teniendo después el privilegio de interpretar una canción en el monumento conmemorativo de Jackson el 7 de julio de 2009.

Y no te quedas ahí, tu versatilidad musical también te ha catapultado al mundo del cine logrando colocar una canción en el film Bratz titulada Now Or Never cuyo audio comparto con vosotr@s: https://youtu.be/qkugN0CxRZg y que, para mi gusto, querida Orianthi es un tema brutal, con energía positiva y fuerza transformadora, de los que tiran hacia arriba de una película, con esa voz de cuasi mezzosoprano y esos solos tan imponentes como limpios. Seguro que tendrás más de una buena canción que pueda “atrapar” a un Director de cine.

Eres una de las doce mejores guitarristas del mundo tras ser nombrada en el Eric Clapton Crossroads Festival, pero el éxito no ha sido sólo fruto del talento, que en tu caso es descomunal, sino del empeño y sacrificio de aquella niña de 11 años que pidió una guitarra eléctrica de segunda mano a su padre y que visionó hasta desgastar los VHS de los solos de Carlos Santana,y, por supuesto, por subirte a un escenario en Adelaida, tu ciudad, con tu máximo ídolo, y no temblarte el pulso antes miles de personas expectantes de escuchar a esa chica que había escogido el mismísimo Carlos Santana (y es que dijiste con aplomo: “¡ahora o nunca!” como tu canción de la película Bratz); como también te escogió el que podía elegir a cualquiera: Michael Jackson.

No sé cuánto le costó esa guitarra eléctrica de segunda mano a tu padre, quien incentivó y estimuló tu interés por la música con su colección de discos, pero es seguro que el retorno de esta inversión es equiparable a los mejores márgenes de las criptomonedas. Y yo, admirada Orianthi, sí que he tenido un retorno impagable: apreciar tu voz, tierna y áspera a la vez, llena de marices y colores que no distorsionan una perfecta afinación unida a tu espectacular dominio de la guitarra. Una apuesta segura para escucharte en los mejores momentos y con las mejores compañías, una referencia musical de los sobresalientes recuerdos de nuestro paseo por la vida.

Y para esta noche de viernes voy a “secuestrar” tu canción “According to you” (también del disco Believe), un tema de los que hacen vibrar y disfrutar cada trago de vida con la intensidad que merece: https://youtu.be/Pu1aQvm5MrU.