Noche de los Premios Princesa de Asturias. Un año más,  Oviedo se convierte en foco de atención del mundo político, cultural y artístico. La nómina de personalidades que han pasado en estos últimos 40 años por el Teatro Campoamor impresiona y conmueve, y especialmente hoy, en la difícil coyuntura actual, puede recordarse aquel paseo de Arafat y de Rabin por el centro de Oviedo, cuando ambos -máximos líderes de Palestina e Israel- recibieron el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia de 1994, precisamente por sus esfuerzos en alcanzar la paz. Otros vendrán que tendrán que recoger el relevo.

Esta noche, tras una semana vibrante en lo personal y profesional con la publicación y difusión de mi libro “Arbitraje y Deporte Femenino”, en una Editorial tan importante como es Dykinson, que por cierto celebra su 50 aniversario en este año: https://www.dykinson.com/libros/arbitraje-y-deporte-femenino/9788411704878/  toca hablar y muy bien de una de las guitarristas más importantes de todos los tiempos. Esta noche exploramos la trayectoria musical de la gran Sister Rosetta Tharpe. Comenzamos.

Rosetta Tharpe nace en Cotton Plant, Arkansas el 20 de marzo de 1915 y fallece en Filadelfia el 9 de octubre de 1973; por lo que apenas hace unos días se cumplió medio siglo de su muerte pero su música y su recuerdo están felizmente vigentes. Su voz y desempeño con la guitarra resultan sublimes. Comenzó en el mundo del Gospel,  música espiritual estadounidense que surgió de los cientos de iglesias pentecostales, protestantes evangélicas afroamericanas en el siglo XIX y que se hizo muy popular durante la década de 1930, convirtiéndose en la primera gran estrella de los años treinta y precursora del mismísimo Rock and Roll que aún estaba por llegar.

Curiosamente ambos estilos parecen antagónicos en su esencia, de la religiosidad del primero a la aparente oscuridad del segundo, pero musicalmente no son tan diferentes y la buena de Rosetta, pese a que tuvo muchas críticas por parte de las comunidades religiosas, no renunció a sumergirse en ambos estilos. Se puede decir que su música influyó, nada menos, que en artistas universales como Little Richard (1932-2020), Johnny Cash (1932-2003), Chuck Berry (1926-2017), Jerry Lee Lewis (1935-2022), o el mismísimo Elvis Presley (1935-1977). Todos ellos en alguna medida beben de la fuenta musical de esta pionera del Rock.

Nuestra protagonista comenzó a edad muy temprana (4 años) a tocar la guitarra y a cantar de la mano de su madre, Katie Bell Nubin, evangelista de la Iglesia de Dios en Cristo (Church of God in Christ), que tocaba la mandolina y predicaba en iglesias del Sur. La mandolina, como alguna vez hemos mencionado aquí, es un instrumento de cuerda de 4 órdenes dobles de cuerdas, cuyo número y tipo ha variado con el tiempo y el lugar, pero en la actualidad la configuración predominante es la de la mandolina napolitana, con cuatro cuerdas dobles afinadas como el violín (sol-re-la-mi). El blues y el jazz fueron estilos que acompañaron la infancia de Rosetta, aunque el traslado familiar a Chicago la puso en la arena de los clubes nocturnos y salas de conciertos en un entorno íntimo e incluso secreto (para no ahondar más las críticas del mundo espiritual del gospel), conciertos en los que más adelante sería acompañada de grandes bandas. Se podría decir que en esos primeros años en Chicago su dimensión musical pública giraba en torno al gospel y la privada y nocturna en torno al blues y al jazz, es esa ciudad tan rica, -máxime en las primeras décadas del Siglo XX-, en intérpretes extraordinarios de ambos estilos, influencia dual que se trasladaba y se percibía en su técnica instrumental, con cierta similitud a la guitarrista Memphis Minnie, “la Reina del Blues” a la que por cierto le dedicamos aquí un espacio en este blog el 29 de julio de 2022: Memphis Minnie, La Reina del Blues

Una de las características musicales del estilo  de guitarra de Tharpe es la hábil mixtura entre el blues urbano y los arreglos folclóricos tradicionales, con un swing especial, una sensación rítmica  original que anunciaría con bastante antelación la llegada del Rock and Roll.

Rosetta comenzó a grabar con guitarra eléctrica en los años cuarenta del pasado siglo y en concreto el tema “That´s All”. ¿Qué os parece si lo escuchamos? https://youtu.be/IX6rv6y8AHQ ¡Cómo canta y cómo toca! Ya han pasado 80 años sin perder un ápice de autenticidad.

Su discografía se integra por los siguientes trabajos: The Lonesome Road (1941), Blessed Assurance (1951), Wedding Ceremony of Sister Rosetta Tharpe and Russell Morrison (1951), Gospel Train (1956), Famous Negro Spirituals and Gospel Songs (1957), Sister Rosetta Tharpe, MGM E3821 (1959), Sister Rosetta Tharpe, Omega OSL31 (1960), Gospels in Rhythm (1960), Live in 1960 (1960), The Gospel Truth with the Bally Jenkins Singers (1961), Sister Rosetta Tharpe, Crown LP5236 (1961), Sister on Tour (1962), Live in Paris (1964), Live at the Hot Club de France (1966), Negro Gospel Sister Rosetta Tharpe and the Hot Gospel Tabernacle Choir and Players (1967), Precious Memories (1968), y Singing in My Soul (1969).

Querida  “Original soul sister” y “Madre de Rock & Roll” ¡Qué puedo decir de ti que ya no se haya dicho y escrito!. Quizás imaginar que de cuando en cuando colonizas la voz y los dedos de alguna talentosa cantante y guitarrista para darte un nuevo paseo por las Iglesias del Gospel y, cómo no, por los atractivos clubes nocturnos de música en vivo de nuestros tiempos. Me llama mucho la atención, querida Rosetta, tu experiencia de haber escuchado a un jovencísimo Little Richard antes de tu actuación en el Auditorio de la ciudad de Macon, teniendo la inmensa generosidad de invitarle a subir al escenario a cantar contigo. Y se ganó su sueldo que tú pagaste con la misma generosidad que te caracteriza. Y qué podemos decir de otro grande como Johnny Cash, quien al pronunciar su discurso de entrada en el Salón de la Fama del Rock and Roll ¿a qué no sabes a que cantante favorita se refirió? Lo sabes, admirada Rosetta, ¡claro que lo sabes!. A más a más, tu influencia llega hasta nuestro días ya que artistas recientemente desaparecidos como Tina Turner o Meat Loaf admiraban y reconocían la influencia de tu música, y, en concreto,  éste último, se refería a la potente energía rítmica que emanaba en tus actuaciones. Por cierto que en este blog dedicamos un capítulo al guitarrista Paul Crook, el 29 de enero de 2022, que acompañó a Meat Loaf en sus últimas giras: Paul Crook, casi treinta años de Hard Rock Si alguna vez te aburres, querida amiga,  -que no lo creo, la verdad es que tiene que haber maravillosas sesiones de gospel y de rock en las estrellas-, siempe podrás entretenerte con este blog dedicado a artistas, muchos de ellos compañeros de tu generación y exponentes de los estilos en los que dejaste tu original huella. Pero me parece que si logramos conmoverte,  lo va a ser con el cantante Frank Turner que en 2018 escribió e interpretó la canción “Sister Rosetta”, cuyo vídeo en vivo  vas a tener que disfrutarlo con nosotr@s: https://youtu.be/jrP4aGSyMlg  

¡Qué bien suena hermana! Una canción digna de la madre del Rock and Roll. ¡Cómo no vas a merecer estar en el Salón de la Fama del Rock and Roll! Debería de llevar tu nombre porque contigo empezó todo, admirada Rosetta. Y sobre esto último, reproduzco seguidamente una frase de Cleveland sobre ti: “Tharpe se conectó a una guitarra eléctrica a fines de la década de 1930 y se convirtió en una estrella de rock antes de que los hombres considerados los pioneros del rock and roll soñaran con hacerlo. Ella es la “madrina del rock and roll” que influyó en cada músico tradicionalmente identificado con ayudar a lanzar el género durante la década de 1950″ (por si no me creías a mí).

Han sido dos horas, querida amiga, estimulantes y entrañables. Pero para cerrar quiero un directo tuyo. ¿Qué te parece “Didn´t It Rain” en un concierto de 1964? https://youtu.be/Y9a49oFalZE Eres sencillamente genial. Tus solos resultan impactantes,  ejecutados con una suficiencia insultante,  nada se te resiste con las seis cuerdas y ¡qué afinación de voz tan extraordinaria! (¡Un despertador con una de tus frases y da igual a la hora que suene! Me levanto en un chasquido de dedos con mi mejor sonrisa, “pintada” por ti, claro).