Tras una tarde intensa en trabajo y clases (la última, un recorrido por la música de la Antigüedad, desde Mesopotamia a Roma, de la asignatura de Historia de la Música I, que curso en la UNIR), toca relajarse y escuchar música estimulante con otra guitarrista interesante de la nueva hornada del Rock. Hoy vamos a hablar de Samantha Fish.

Samantha Fish es estadounidense. Nace el 30 de enero de 1989  en Kansas City (Missouri), por lo que en el próximo mes de enero cumplirá 36 años. Tanto ella como su hermana mayor compartían pasión por el Blues, al punto de que la buena de Samantha se encerraba concienzudamente en su habitación para tocar la guitarra, mientras que su hermana mayor hacía lo propio para cantar.  Sus primeras influencias musicales vinieron de la música de los Rolling Stones y Tom Petty pero también de  bluesmen ​ como Stevie Ray Vaughan (1954-1990),  Son House (1902-1988), y Skip James (1902-1969).

Precisamente, en este foro se dedicó un espacio a dos guitarristas de los Rolling Stones: Keith Richard, el 28 de febrero de 2020: Keith Richards, una guitarra rítmica de impresión. y Brian Jones el 20 de noviembre de 2020: Brian Jones, 328 meses de un talento superlativo

Samantha tenía talento y mucha hambre musical, y pronto comenzó a desplegar sus habilidades con las seis cuerdas, pero también en el canto, por lo que sus primeras actuaciones en vivo únicamente precisaban de la sección rítmica de un bajista y de un baterista. El nombre de la banda personaliza su liderazgo: Samantha Fish Blues Band, y, pronto, con sólo 20 años, en 2009, graban su primer álbum. Producen el trabajo por su cuenta pero consiguen llamar la atención del sello de blues germano  Ruf Récords, se trata  un sello discográfico independiente, fundado en 1994 por el manager de Luther Allison (1939-1997), Thomas Ruf, para promover la carrera de  aquél, si bien su fallecimiento no impidió el desarrollo de esta discográfica apostando por otros talentos del blues como Fish. En 2011 graba en esta sede , junto con otras dos cantantes de blues,  el álbum Girls with Guitars y, después, ya bajo su propio nombre el álbum Runaway.

La buena acogida de Runeway  le catapultó al premio Blues Music Award como mejor artista de Blues, premio que recibe en 2012, reconocimiento otorgado por la Blues Foundation, una organización sin ánimo de lucro creada para potenciar el patrimonio del blues, como máximo tributo a compositores e intérpretes de este estilo.

Su segundo álbum en solitario con Ruf Récords  llega un año después, en 2013, titulado , Black Wind Howlin,  trabajo en el que predomina un blues con guitarra saturada, y, ya en 2015, llega un álbum más intimista y acorde a las fuentes tradicionales del blues: Wild Heart.

Su carrera discográfica se completa con los trabajos: ​Chills & Fever (2017) y  Kill Or Be Kind (2019).

Hablamos de una artista cuyo centro de operaciones sigue estando en su tierra natal, Kansas City, donde ha encontrado reconocimiento y continuidad para sus actuaciones en vivo, bien apreciadas por público y crítica.

Pero, ahora nos toca a nosotr@s escuchar y valorar a esta artista. ¿Qué tal esta actuación en vivo del tema Better be Lonely?: https://www.youtube.com/watch?v=OEo2qZpaep0

Un show honesto y auténtico, calidad interpretativa y una estupenda voz, tan original como apropiada para el género, dulce y desgarradora -según cada momento- y un sólo de guitarra muy trabajado. Mi impresión es la de ver y escuchar a una artista de una época anterior (pero de una gran época, desde luego), a diferencia de la canción que vamos a escuchar ahora, con más Rock y contundencia,  y con un registro de voz diferente y atractivo. La canción es Deathwish y éste es su vídeo oficial : https://youtu.be/kdHJmnd338o

Hablamos de una artista con una carrera sólida y consolidada de la que no hay muchos datos en la red sobre su vida personal y anecdotario profesional. Pero, a veces, querida Samantha, es mejor así, ningún dato biográfico va a nublar la claridad de tu voz, la calidad de tus letras y tu arrebatadora y segura interpretación con la guitarra. Estoy convencido de que quedan muchas canciones por componer y por tocar, apenas llevas dos décadas en la “autopista musical” , sólo espero que esa ilusión de la Samantha pre adolescente se mantenga efervescente en clave creativa, y que cada concierto sea siempre una experiencia irrepetible y especial, porque en realidad lo es, nunca suena igual, el público cambia y cuando repite tiene un estado de ánimo diferente, un concierto siempre es único y perdura en el recuerdo de muchos de tus fans. Con esa energía renovada y el talento que atesoras siempre habrá una canción nueva o una genial interpretación por la que seguirte y aplaudirte (en Kansas City o en cualquier rincón del mundo. Ojalá que más pronto que tarde podamos disfrutar de tu música en muchas de nuestras ciudades españolas, en las que hay muchos seguidores del Blues, -puedes creerme-, y de toda la cultura artística que este estilo ha proyectado a nivel universal).