Noche cerrada de final de junio y, claro está, que esta nueva biografía del blog terminará en el mes de julio,  que ya está tocando nuestra puerta temporal (casi aporreándola: tranquilo “julio” , ya vamos…). Tras una semana un tanto especial en el que además de las labores de mi apasionante profesión de abogado, me hallo inmenso en la preparación de 3 asignaturas del Grado de Música de las que me he matriculado en este cuatrimestre: Informática Musical, Fuentes y Documentación, y Música de los Siglos XX y XXI, cuyos exámenes serán la próxima semana, -pero esa será otra historia-, toca ahora desconectar, y lo haré de la mano de una joven cantante y guitarrista inglesa llamada Joanne Shaw Taylor. Comenzamos:

Joanne nace en Wednesbury, West Midlands, en febrero de 1985, cuenta por tanto con 38 años, y apenas era un bebé de medio año cuando viajé por primera vez a Inglaterra allá por el verano de 1985 a mis 14 insultantes años. Cuando nuestra protagonista de hoy apenas había cumplido 16 fue descubierta por -nada más y nada menos- que Dave Stewart del recordado grupo Eurythmics (banda británica de synth pop, originaria de Londres, formada por Annie Lennox y el propio David  a principios del año 1980. Consiguió durante su existencia un enorme éxito comercial y ha llegado a vender 80 millones de discos en todo el mundo). Seguro que os llamará la atención la calificación de esta banda como parte del estilo synth pop -como también a mí-, y que viene a ser un subgénero del pop y de la música electrónica nacido a finales de los años 70, que está fuertemente influenciado por el popular movimiento denominado new wave, y que toma prestados otros elementos de la música disco, el post-punk, el experimental estilo germano krautrock y el glam rock. Pero volvamos a lo troncal, el buen ojo de David con Joanne estuvo a la altura de sus prestaciones en Eurythmics, ya que en 2010 Taylor ganó el premio a Mejor Vocalista Femenina en los British Blues Awards (y repitió en 2011) , además del premio en la categoría de Mejor Compositora del año  por “Same as It Never Was”, del disco Diamonds in the Dirt. Precisamente, nuestra inmersión en su música va a iniciarse con este tema que comparto encantado con vosotr@s mientras paladeo las últimas gotas de mi tercer café del día: https://youtu.be/2blxZxmh3yI Suena de cine amig@s, con esa voz entre áspera y dulce, que tan bien marida con el blues, y la claridad en la pulsación de las notas de su Fender Telecaster. Eso sí, me pregunto qué hago tomando un café en lugar de una cerveza bien fría. Al tiempo. 

Nuestra compositora, pese a nacer en Wednesbury, crece en Solihull, una coqueta ciudad de apenas 100.000 habitantes, muy cercana a Birmingham. Sus sueños de adolescente se proyectaron al campo musical y esas primera influencias que forjarían su original estilo vinieron de la mano del estadounidense Stevie Ray Vaughan, quien destacó por su interesante fusión del blues y rock a principios de los ochenta, el también estadounidense Albert Collins, guitarrista y cantante de blues, ya fallecido cuando la buena de Joanne lo escuchaba (falleció en 1993 cuando apenas tenía 8 años), y, cómo no, a  Jimi Hendrix, a quien dedicamos aquí un espacio el 8 de marzo de 2019: Jimi Hendrix: contigo empezó todo 

Pero volvamos al momento mágico del descubrimiento de la artista por el atinado Dave Stewart: tras escucharla tocar la invitó a unirse a su supergrupo, D.U.P. (Da Univerzal Playaz), de gira por Europa durante 2002. ¡Menudo comienzo amiga!  Su carrera discográfica propia aún estaba en gestación pero buena parte de esas ingeniosas ideas y texturas musicales estaban ya en plena elaboración. En mayo de 2009, Taylor lanzó su álbum debut, White Sugar, al que le siguió el ya reseñado Diamonds in the Dirt de 2010. Ambos álbumes alcanzaron el puesto número 8 en los EE. UU., en la lista Billboard Top Blues Albums de la revista semanal estadounidense,  especializada en información sobre la industria musical, que se remonta, nada menos, que a 1894. Vamos a disfrutar de un vídeo en directo de ese primer disco del tema “White Sugar” (como el título del álbum), y es que merece la pena comprobar su talla artística sobre el escenario cuando apenas comenzaba su carrera:  https://youtu.be/obJXYA-v8NE Resulta brutal cómo siente y cómo vive el blues, sin ser afroamericana ni siquiera americana, pero, querid@s amig@s, el gran B.B. King, a quien dedicamos aquí el 14 de diciembre de 2018 una biografía personalizada: B de Blues: B.B. King , estaría de acuerdo conmigo: resulta un espectáculo su paleta de sonidos y su contundente expresividad. 

Su dominio técnico como guitarrista  pronto fue demandado por artistas de  la talla de Annie Lennox (la otra mitad de Eurythmics), cuya banda integró  en el Concierto del Jubileo de Diamante en Londres por los 60 años de reinado de Isabel II.

La carrera discográfica de Taylor se completa con los siguientes trabajos: Almost Always Never (2012), Songs from de Road (2013), The Dirty Truth (2014), Wild (2016), Reckless Heart (2019), Reckless Blues EP (2020), The Blues Album (2021), Blues from the Heart: Live (2022), Nobody’s Fool (2022); como vemos, una más que completa lista de discos casi en periodicidad anual, y , además, a partir del álbum The Dirty Truth  se grabaron en Estados Unidos, y, en concreto, éste en Memphis, Tennessee, y el siguiente , “Wild”, en los estudios Grand Victor de Nashville, trabajo que le valió para conseguir su primera entrada Top 20 en la lista de álbumes del Reino Unido; consiguiendo a partir de 2018 un importante contrato con una gigante discográfica como es Sony (los gigantes siempre se juntan cuando no se “revuelven”). 

El material instrumental de Joanne se compone de guitarras eléctricas Fender Telecaster, aunque también usa una Gibson Les Paul y, en ocasiones maneja las Stratocasters para trabajos de guitarra rítmica, proyectadas en amplificadores Marshall para un sonido más pesado y un Fender Pro Reverb de la década de 1970 para un sonido más limpio.

Admirada Joanne, ¿qué tal está “Junior” ? ¿se pone celosa cuando acaricias la Telecaster modelo Fender Albert Collins (regalo del gran Joe Bonamassa)? Seguro que no, porque “Junior”, fue la primera: eso sí con algunas mejoras aplicadas al modelo Esquire de 1966, comprada de segunda mano en Denmark Street (Londres), a la que agregaste una pastilla de mástil humbucker Fender Jazz. Me pregunto si fuiste consciente en tu concierto del Palacio de Buckingham (en el que se concentraron más de 12.000 personas, sin contar  muchos otros  miles alineados en The Mall: calle situada en la Ciudad de Westminster, Londres, entre el Palacio de Buckingham al oeste y Trafalgar Square), cuando en plena interpretación de tu solo el pedal Fuzz Face  falló, dejando un sonido de guitarra mucho más limpio de lo habitual, que puso en valor por cierto otro grande de los ochenta como Stevie Wonder. Seguro que ni te inmutaste, son muchas las actuaciones que ya llevabas a tus espaldas desde principios de siglo y tu dominio del instrumento está muy por encima de efectos más o menos fiables. Has encontrado tu lugar en la escena musical internacional en un estilo lleno de practicantes y nostálgicos como es el blues, muchos son los que interpretan las recurrentes y aparentemente sencillas escalas pentatónicas, dentro de esa estructura de 12 compases trazada por el gran  W. C. Handy (1873-1958) , “The Father of the Blues“, pero pocos los que conectan con la esencia de esta música que desborda emociones, proyecta energías e inspira estímulos colectivos, siendo tan influyente en tantos otros estilos. Y lo que me parece aún más importante, querida Joanne, ser capaz de innovar 150 años después en este estilo, americano pero felizmente mixto porque no podemos olvidar a las muchas y buenas cantantes femeninas del género. Desde luego que sí, admirada Joanne, Bessie Smith (1894-1937) o Nina Simone (1933-2003), entre muchas otras, estarían encantadas en compartir una blues session contigo, como lo estoy yo de haber disfrutado de este viaje trepidante por tu música, que cerramos, ya sí, con el vídeo del single If That Ain’t a Reason, de 2021: https://youtu.be/H4Vq6JHey8Y , estimulante y fresco, con imágenes de su grabación en estudio. Extraordinario trabajo, extraordinaria carrera.